miércoles, 5 de noviembre de 2014

La visión que tiene Martín Fierro del:

-El gaucho:
Este personaje en el nuevo orden del país es desplazado y perseguido.
“Y atiendan la relación 

Que hace un gaucho perseguido”

Esta situación lo hace sentir como un delincuente.
  • “El ser gaucho es un delito”
Sólo es buscado con interés en los comicios.
“Porque el gaucho en esta tierra

Solo sirve pa' votar”

Lamenta este estado, porque considera que es injusto y lo obliga a renegar de su origen.
De todo el que nació gaucho

Esta es la suerte maldita”

Además su voluntad no está representada, así lo entiende y lo expresa con dolor.
  • “Porque el gaucho desgraciao
No tiene a quién dar su queja”.

  • El Gringo:
El gaucho en todo momento desvaloriza al gringo porque considera que invade su territorio.
En algunos casos es irónico por la manera en que se expresa.
  • “Hasta un inglés sanjiador
  • Que decía en la última guerra

  • Que él era de Inca - la - perra”

Se burla de su apariencia física y su cobardía.
¡Tan grande el gringo y tan feo !

Lo viera cómo lloraba”

Destaca además la poca destreza que posee en las tareas específicas de campo.
“Gringada que ni siquiera

Se sabe atracar un pingo”

“No sirven ni pa' carnear”


También critica sus costumbres y su avaricia.
  • “Y eso sí, en lo delicaos
  • Parecen hijos de rico”
  • “Si usté no les da, no pitan
Pa' no gastar en tabaco”

Finalmente reflexiona que este personaje no puede vivir junto al gaucho valiente y aguerrido.
  • “Que diablos - sólo son güenos
pa' vivir entre maricas”.

El gringo es un inadaptado, sin lugar a duda, dentro del Universo de Martín Fierro. El gringo es un habitante marginal y extraño en ese orbe que lo vapulea sin compasión y con su miseria y su rigor.

  • El indio:
En el poema, el autor presenta la visión del indio, a través de la voz del protagonista y sus vivencias personales.
Considera que la indiada en general es indómita y no incorpora los elementos de la primitiva civilización.
  • En los caballos en pelo
Se vienen medio desnudos”

Que se caracteriza por sus hábitos grupales violentos.
El indio - por donde dentra

Roba y mata cuanto encuentra”

“La indiada todita entera

Dando alaridos cargó”

Que su conducta es irracional e impetuosa.
  • “Que el indio lo arregla todo
Con la lanza y con los gritos”

Es habitual el ejercicio de la crueldad para con los más desvalidos.
  • “Le descarnaban los pieces
  • A las pobrecitas vivas”

  • “Es guerra cruel la del indio
Porque viene como fiera”

Manifiesta un profundo rechazo y desagrado al recordar un estilo de vida diferente y los padecimientos que sufrió por esta gente.
  • “Estos indios vagabundos
Con repunancia me acuerdo”

El indio para Martín Fierro, era ladrón, indomable, implacable y traidor para la guerra.
Duelos:


Primer Duelo: la primer muerte se da cuando Martín Fierro se encuentra en un baile, y a causa de su ebriedad éste provoca al negro, generando en el Moreno mucha bronca. Esto lo lleva a la pelea; en un momento de la pelea el Moreno corta a Fierro, el cual se enfurece y decide terminar con la vida de aquel cantor. Debido a esto, este duelo se caracteriza por ser un enfrentamiento de agilidad física y fuerza bruta, con armas de por medio.

“Me hirvió la sangre en las venas
y me le afirmé al moreno,
dándole de punta y hacha
pa dejar un diablo menos.
Por fin en una topada
en el cuchillo lo alcé,
y como un saco de güesos
contra un cerco lo largué.
Tiró unas cuantas patadas
y ya cantó pal carnero:
nunca me puedo olvidar
de la agonía de aquel negro.
En esto la negra vino
con los ojos como ají
y empezó la pobre allí
a bramar como una loba.
yo quise darle una soba
a ver si la hacía callar,
mas pude reflesionar
que era malo en aquel punto,
y por respeto al dijunto
no la quise castigar.
Limpié el facón en los pastos,
desate mi redomón,
monté despacio y salí
al tranco pa el ca˜nadon.
Después supe que al finao
ni siquiera lo velaron,
y retobao en un cuero,
sin rezarle lo enterraron.”

Segundo Duelo: se da en la payada con el hermano del Moreno (asesinado por Fierro) donde comienzan una payada de contrapunto. Luego de varias estrofas el negro saca el tema de la muerte de su hermano para intentar vengarse. Debido a esto, este duelo se caracteriza como un duelo de payada en el que solo servía una buena destreza como cantor. Las “armas” utilizadas eran dos guitarras.
MARTIN FIERRO
!Ah, negro!, si sos tan sabio
No tengás ningun recelo
Pero has tragao el anzuelo
Y al compás del estrumento
Has de decirme al momento
Cuál es el canto del cielo.
EL MORENO
Cuentan que de mi color
Dios hizo al hombre primero,
Más los blancos altaneros,
Los mesmos que lo convidan,
Hasta de nombrarlo olvidan
Y sólo le llaman negro.

Consejos de Fierro a sus hijos:





Poesía Gauchesca: La gauchesca  fue señalada, por críticos como Ricardo Rojas y Ángel Rama, como un sistema "paralelo" que se desarrolla a lo largo del siglo XIX. Es, en cierto modo, el gran género de la literatura Argentina (con un trabajo específico sobre la lengua y sobre las formas), aunque al mismo tiempo es un género que resultó por mucho tiempo ilegible como literatura. Sin modelo europeo, la gauchesca nace y alcanza su plenitud en el siglo XIX y presenta dos rasgos que la definen contradictoriamente. Por su materia y por su pretensión mimética de la oralidad rural, remite a prácticas, saberes y decires tradicionales. Por su sistema de circulación, por su cruce con los grandes problemas sociales y políticos de su tiempo y por las operaciones que realiza con la lengua, se diría que está por delante de otras formas literarias coetáneas con las cuales, sin embargo, siempre parece colocarse en una posición de minoridad. La operación que define a la literatura gauchesca es la cesión, por parte del autor, de la voz al personaje gaucho. Esta lengua gauchesca en verso no es una mímesis de la lengua hablada por los gauchos como sujetos sociales, sino un producto retórico y literario, creado en y por el género. Se afirma que la gauchesca organiza un sistema literario paralelo porque, a pesar de que el texto más reconocido es el Martín Fierro (1872-1879) de José Hernández, hay una línea de textos y autores que organizan una tradición propia, desde las primeras hasta las última décadas del siglo XIX, aunque en muchos casos se trate de producciones anónimas. Un breve itinerario del género podría iniciarse en el virreinato. El canónigo Juan Baltazar Maciel (1727-1788) escribe en 1777 el romance "Canta un guaso en estilo campestre los triunfos del Excmo. señor Don Pedro de Cevallos". El poema se aparta de la lírica culta para tentar una veta popular. Sus primeros versos ("Aquí me pongo a cantar / debajo de aquestas talas") presentan una fórmula que será común a la gauchesca y que llegará ya consagrada hasta el Martín Fierro.

José Hernandez










José Hernández (1834-1886), poeta y federalista argentino, su gran poema Martín Fierro, considerado un clásico de su país, cantó la independencia, el estoicismo y el coraje del gaucho.
El poeta argentino José Hernández fue un autodidacta que luchó por la autonomía de los gauchos. Curiosamente lo que no consiguió en su actividad política lo obtuvo por medio de la literatura. Su poema épico conocido como Martín Fierro, formado por dos partes: El gaucho Martín Fierro y La vuelta de Martín Fierro, se convirtió en la obra capital de la Literatura Argentina y reflejo de la paz, sencillez e independencia de la gente de la Pampa: los gauchos.
VIDA:
No se tienen muchos datos sobre la infancia de Hernández, aunque parece ser que una enfermedad de la adolescencia le obligó a vivir en las pampas. Allí fue donde entró en contacto con el estilo de vida, la lengua y el código del honor de los gauchos.
Autodidacta, adquirió una sólida ideología política a través de sus numerosas lecturas. Su postura federal y reformista le llevó a enfrentarse con Sarmiento. Entre 1852 y 1872, durante una época de gran agitación política, defendió la idea de que las provincias no debían permanecer ligadas a las autoridades centrales, establecidas en Buenos Aires. Participó en la última rebelión gaucha, la del general Ricardo López Jordán, un desdichado movimiento que finalizó en 1871 con la derrota de los gauchos y el exilio de Hernández a Brasil. Con la victoria de Nicolás Avellaneda, pudo regresar a Argentina en 1874. Vivió en Buenos Aires y continuó su lucha por otros medios: fundó el periódico Revista del Río de la Plata, en el que defendió posturas federalistas, y desempeñó los cargos de diputado y senador de la provincia de Buenos Aires.
José Hernández se había criado y educado en el campo, en las estancias de Piñero, Vela, Llavallol, Casares y otras, luchando junto con los indios en las fronteras, y conociendo la vida terrible de los fortines. Educado en el ambiente viril de la campaña, practicaba las faenas rurales con la habilidad del gaucho más experto. Y estaba también familiarizado con sus costumbres, su lenguaje pintoresco, sus vicios y virtudes. Hernández quería a los gauchos; conocía el rigor injusto con que se los trataba, la vida miserable a que se los tenía condenados, y había resuelto valerse de su posición social y de su cultura para ayudarlos.
Finalmente, en la primera parte Hernández “pinta” a Fierro como una persona revelada en contra de la política del gobierno, en la segunda parte el gaucho se debe adaptar a ese sistema que lo está dejando de lado. Esta adaptación de Martín Fierro está muy relacionada con el puesto político que José Hernández tenía en el gobierno, en ese entonces.
OBRA:
Sin embargo, fue a través de su poesía como José Hernández consiguió un gran eco para sus propuestas y contribuyó de la forma más valiosa a la causa de los gauchos. Con un total de 7.210 versos, Martín Fierro es un poema épico popular que está considerado como una de las grandes obras de la literatura argentina. Fierro narra su vida y lleva a cabo un retrato de la sencillez rural, la independencia y la paz de su espíritu. En su primera parte, El gaucho Martín Fierro (1872), el poema recorre la inicial felicidad del protagonista en las planicies rodeado de su familia, hasta que es obligado a alistarse en el Ejército. Su odio a la vida militar le lleva a rebelarse y desertar. A su regreso, descubre que su casa ha sido destruida y su familia se ha marchado, y la desesperación le empuja a unirse a los indios del desierto y convertirse en un hombre fuera de la ley. En la segunda parte del poema, La vuelta de Martín Fierro (1879), sus sentimientos e ideas han cambiado. Fierro decide volver y reunirse por fin con los suyos. Incorporado de nuevo a la sociedad, ha de sacrificar gran parte de su preciosa independencia.
El gran mérito del autor del Martín Fierro fue llevar a la literatura la vida de un gaucho, contándola en primera persona, con sus propias palabras e imbuido de su espíritu. En él descubrió la encarnación del coraje y la integridad propia de una vida independiente. Para José Hernández, el gaucho era el verdadero representante del carácter argentino, idea que le situó en directa oposición con el curso de los acontecimientos y los poderosos intereses políticos de su época.